domingo, 25 de mayo de 2014

CASTILLO DE LUNA - ESTILO MUDÉJAR

Ya que nuestro Castillo es de estilo Mudéjar, aquí os dejamos unas explicaciones sobre el propio estilo para que lo entendáis un poco mejor.



ARTE MUDÉJAR
La reconquista cristiana de Al-Ándalus, duró 8 siglos (del 8 al 15), por lo que dejó una profunda huella en la cultura española.
Para la repoblación de España, en el norte, tuvieron que tomar una decisión política de profundas consecuencias para la cultura medieval española, en la que autorizaron a los musulmanes vencidos, a quedarse bajo dominio cristiano a repoblar los territorios conquistados , eso sí, manteniendo su religión al islam, su idioma árabe y una organización jurídica propio, éstos son los llamados MUDÉJARES.

SINGULAR FENÓMENO DEL ARTE MUDÉJAR
La asimilación cultural de los mudéjares, la fascinación de los cristianos por los monumentos islámicos de los territorios reconquistados, así como las estrechas relaciones que tenían con los territorios aún no reconquistados de Al- Ándalus, son algunos de los factores que explican este singular fenómeno del arte mudéjar.
El arte mudéjar ha sido una manifestación artística de la España Cristiana-Medieval, donde han convivido cristianos, musulmanes y judíos,  unas circunstancias sociales las cuales han dado lugar al nacimiento del arte mudéjar.
Pervivencia de la tradición artística histórica islámica en la España cristiana-medieval, que dio lugar a una nueva expresión artística diferente de los elementos islámicos y cristianos que la integraban.
Es la manifestación del arte español más contradictoriamente interpretada hasta el momento, ya que unos decían que era el brillante capítulo final del arte hispano-musulmán, y por otra parte los que decían que era un añadido ornamental de tradición islámica a los estilos románico o gótico.
No es ni uno, ni otro. Es un eslabón de enlace entre arte musulmán y arte cristiano-occidental.

FACTORES QUE POSIBILITARON EL ARTE MUDÉJAR
1.- Fascinación de la sociedad cristiana por el arte islámico.
2.- El propio proceso histórico de la reconquista.

La paulatina ocupación del territorio, incorpora además al dominio cristiano un patrimonio monumental islámico. Sobresalen los Alcázares y las Mezquitas, que se convirtieron con la reconquista en los Alcázares de los Reyes y en Catedrales.
Tuvo su expansión en los siglos bajo-medievales salpicando de su estilo casi toda la geografía española.
El arte mudéjar eran construcciones abundantes, baratas y eficaces, unidad fundamental en el sistema de trabajo.

ESCUELAS REGIONALES O FOCOS
1.- Leonés y castellano viejo
      Durante los Siglos XII y XIII, toma mayor importancia, primero desde la comarca de Sahagún  (León) hasta  Moraña (Ávila), y a mediados del siglo XIII en Toledo, actúa de  crisol  de los elementos gótico-almohade, que van a caracterizar el arte mudéjar y desde aquí se va a difundir por toda la península.
2.- Extremadura
      Si bien, la  historiografía tradicional había vaciado al foco mudéjar extremeño de personalidad propia,  los nuevos estudios han revelado una poderosa personalidad.
3.- Andalucía
     El arte mudéjar es rico y multiforme, debido a razones geográficas, pero sobre todo por razones históricas.
4.- Aragón
     El aragonés es el de más poderosa personalidad artística en el panorama hispánico. A la configuración de esta fuerte singularidad que el ladrillo juega en la arquitectura mudéjar aragonesa, tanto con carácter  constructivo como ornamental.

Privativo del arte español, nacido y desarrollado en la España Medieval-Cristiana como consecuencia de la pervivencia de lo islámico.
Una realidad artística nueva, en la que se funden elementos formales  de oriente y occidente.


Como bien dijo Menéndez Pelayo, el arte mudéjar constituye el único estilo artístico del que España puede presumir como propio.




martes, 13 de mayo de 2014

Visita del Taller de Empleo de La Rinconada. 9 de mayo

El viernes día 9 de mayo recibimos la visita del taller de empleo de La Rinconada. Durante la mañana les estuvimos mostrando algunos de los monumentos mas destacados de la localidad.

1- Visita a La Plaza Antonio Mairena (Plaza de las Flores) y Capilla del Santísimo Cristo de la Cárcel. 




2- Visita al Castillo y la Casa Museo.





3- Visita Iglesia Parroquial Nuestra Señora de la Asunción





Desde el taller de empleo de turismo de Mairena del Alcor, queremos agradecer a los alumnos de taller de empleo de La Rinconada por su visita.

 



sábado, 3 de mayo de 2014

Don Elías Méndez Carrión

Hay personas que pasan por la vida haciendo buenas cosas, pero su reconocimiento no les llega hasta después de fallecidos. A otras ni así.

 Las características más sobresalientes de este hombre eran su gran humildad, caridad cristiana y fervor religioso que, unidas a una exquisita preparación hacían de él un auténtico caballero.

Como miembro de una de las familias acomodadas de la localidad, su patrimonio le permitía vivir desahogadamente dedicándose a las actividades caritativas y religiosas para las que se sentía especialmente inclinado. Era propietario de las tierras de Santa lucía, dónde se ubicaba una de las tres ermitas que existían en Mairena del Alcor, junto a las de El  Cristo de la Cárcel y la de San Sebastián. Igualmente era dueño de varias casas. Él residía en una de ellas situada en la calle Daoiz ("calle La Iglesia") que coincidía con lo que es actualmente la farmacia. Era un casa enorme que albergaba un molino de aceite y un oratorio, dependencia normal en esta época en las casas de las personas pudientes y devotas. Este molino era el único de Mairena que se cerraba el domingo, por ser día de descanso obligatorio prescrito por la Iglesia, aún a costa de los perjuicios económicos que esto suponía para D. Elías.

El oratorio contaba con distintas imágenes religiosas entre las cuáles destacaba la talla de la Virgen de la Ancilla, Virgen de gloria que presidía el oratorio junto a las tallas escultóricas. También poseía gran número de cuadros piadosos que actualmente se conservan en la Iglesia parroquial de Mairena.

A pesar de su ventajosa posición económica y social su aspiración no era de lucro o la fama sino practicar la caridad. Así nos lo ha relatado. Doña Dolores Guillén Jiménez que recuerda como cada día en la casa de este hombre se preparaba comida no sólo para la familia y el personal de servicio de la misma sino también para los mendigos y necesitados que llegaban pidiendo ayuda. Su humildad no le permitía que esto fuera conocido por sus vecinos ya que él no buscaba con la práctica de la caridad la fama o reconocimiento público, sólo la satisfacción interior de poder ayudar al prójimo.Otro ejemplo de caridad cristiana se pone de manifiesto cuando, al quedar huérfana Doña Dolores Guillén, permite a su tía, Doña Ángeles Guillén, que trabaja para él como criada, recoger a esta niña que desde este momento vivirá en su casa ayudando a su tía en los quehaceres domésticos.

En el tiempo en que presta servicio militar tiene ocasión de conocer a la hermana de un compañero natural de Olivares de quien se enamora y con quien contrae matrimonio posteriormente. Se trata de Doña Concepción Armero y Martínez de Tejada. A partir de este momento se concentra en sus actividades religiosas y literarias, amén de continuar practicando la caridad de tal manera que su fortuna irá menguando a pasos agigantados.
Ayuda a las distintas hermandades de la localidad, aunque los casos más destacados son la Hermandad del Cristo de la Cárcel para quien escribe el primer Quinario, publicado a título póstumo en el año 1929 y la Hermandad del Cristo de la Vera Cruz, a quien dona el 20 de Enero de 1921 la talla de la Virgen de la Ancilla que, a partir de estos momentos, pasará a formar parte de la Hermandad como titular de la misma. Al año siguiente, la Hdad. De la Vera Cruz, en agradecimiento por las donaciones de la talla de la Virgen y, en general, por sus desvelos hacia la hermandad, lo nombra Hermano Mayor Honorario.

Los últimos años de su vida están marcados por la pobreza. Su extrema generosidad lo obligan a deshacerse de sus tierras debiendo vender la finca de Santa Lucía, aunque se reservó una cuerda de terreno alrededor de la ermita para evitar que sevdemoliera o dañase. Igualmente hubo de abandonar su casa para irse a vivir a otra mucho más modesta de la misma calle, acompañado siempre por sus sirvientas que no lo consideraban ya el señor de la casa sino un familiar entrañable y muy querido.

Su salud se deterioraba lentamente y en el año 1929, sintiendo cercana la muerte, hace saber a D. Leocadio Arias Martínez, segundo secretario de la Hermandad de la Vera Cruz su deseo, como donante de la talla de la Virgen de la Ancilla, de suscribir un documento donde constara la donación de dicha escultura, con sus vestidos y alhajas. Unos días después, el 28 de Abril de 1929, muere a los 66 años en la más absoluta miseria hasta el punto que su entierro en el Cementerio Municipal de la localidad fue costeado por suscripción popular entre los conciudadanos, movidos por el gran respeto y admiración que inspiraba este hombre. Tras su muerte, al no haber testamento, su mujer, sus primos hermanos y sus sobrinos se reparten sus escasos bienes que previamente habían reclamado.

La aportación de la Virgen de la Ancilla a la Hdad. de la Vera Cruz, la confección del Quinario al Santísimo Cristo de la Cárcel, la recopilación inédita de relatos sobre personajes famosos de Mairena junto a los cuadros que adornan actualmente la Iglesia Parroquial, como antes hemos referido, que llegarán a ella tras las destrucciones de la Guerra Civil, amén del cuadro de San Pedro que se hallaba en el Sagrario de esta Iglesia donado por D. Elías antes de su muerte y que no sufrió ningún desperfecto por encontrarse a bastante altura, son los legados más importantes de este singular mairenero.

El reconocimiento de Mairena hacia él se puso de manifiesto cuando el día 18 de Mayo de 1983 fueron trasladados sus restos mortales a la capilla del Cristo de la Cárcel.

                                                       
Gracias a Doña Emilia Cubero Madroñal. Licenciad en Geografía e Historia.





jueves, 1 de mayo de 2014

EL CASTILLO DE MI PUEBLO ES PARTICULAR..

El estar situado en Los Alcores Sevillanos, ya es un privilegio, por su historia, por su clima, por su imagen. Cuando vamos paseando por la calle Camino las Minas, de camino para el Alconchel y miras para tu derecha y divisas la Vega, eso es un regalo para la vista, sobre todo en esta época de primavera en la que el suelo está vestido de diversas tonalidades de verde. Y si miras a tu izquierda podrás ver  nuestro Castillo de Luna, ¿porqué de Luna?...hay algunas hipótesis pero ninguna a ciencia cierta, es algo más popular, como cuando a algo o a alguien se le empieza llamando por un nombre, y al final se le queda, pues aquí ha pasado lo mismo, le empezaron llamando de Luna y por tal lo llaman sus maireneros (y que no se le cambie “por Dios”...)

Es un Castillo como puede ser otro cualquiera, ¿no?, pero es el nuestro, y lo adoramos, “clarooo”, dirán los forasteros, pero es que es particular, como la canción que cantábamos cuando éramos pequeños. Es un Castillo que está metido en el pueblo, tanto, que algunas mujeres cuando salen a su patio a tender, se topan con la torre Duque, (que privilegio tenerlo tan cerquita). Un Castillo que tiene casi siete Siglos, propiedad de la importante familia Ponce de León, que fue construido sin tener que serlo,  y aun así participó en la conocida Banda Morisca para la reconquista de Granada.

El Castillo de Luna, como le gusta a sus maireneros que se le llame, fue el pionero en construcción militar adaptada al tiro con artillería, y por ello  esta innovación sitúa al Castillo de MAIRENA DEL ALCOR, en un estudio avanzado respecto a la tradicional muralla bajo medieval y lo coloca como un precedente de BALUARTE DE LA EDAD MODERNA.
Esta fortificación perteneció a la familia Ponce de León hasta el año 1789 que quedó sin descendencia directa masculina, pasando a heredarlo los Duques de Osuna, familia cercana a los Ponce de León, los cuales lo poseyeron hasta el año 1897, en el que el último heredero también sin descendencia directa masculina y arruinado por malgastar toda la fortuna familiar (que no era poca), tiene que ceder todo lo poseído en junta de acreedores.

¿Otra particularidad?...que se convirtiera en vivienda.
En el Siglo XX, llega hasta Los Alcores, el arqueólogo D. George Edward Bonsor Saint Martin, para nosotros, Jorge Bonsor (si queréis saber algo más sobre él, podéis leer entre nuestras entrada, una dedicada al mismo).
A modo de recordatorio, solo anotar que una de las peculiaridades de Jorge Bonsor fue la de caracterizarse por ser un arqueólogo del territorio, ¿esto qué quiere decir?...quiere decir, que hacía un estudio compaginado del espacio y del tiempo, e iba anotando todo sin dejarse atrás un detalle por pequeño que fuese y de una forma sistemática.
El punto de arranque de sus investigaciones fue la exploración de Los Alcores, que tuvo lugar entre los años 1894 y 1899. Estas investigaciones fueron publicadas en Francia, en “Les colonies agricoles prerromaines de la Vallée du Betis”, 1ª obra moderna sobre civilización tartésica.

Este señor compra el Castillo en el año 1902 por 12 €, (2000 de las antiguas pesetas), lo reforma (año 1902-1907) y lo hace su vivienda, instalando en el antiguo cuerpo de guardia de la fortificación, su museo.
El patio de armas lo convierte en un precioso jardín, del que hoy pueden disfrutar sus visitantes. Como buen amante de la arqueología, podemos encontrar restos a modo de ornamentación o reciclado, como pueden ser tejas romanas, bolaños de cañón, ruedas de molino, etc., etc., por todo el Castillo. Cegó la puerta principal que se encontraba en el antiguo cuerpo de guardia, y abrió una grande para carruajes, que da a la zona del olivar (comprado también por él), y otra pequeña, por la que sus visitantes tienen acceso al mismo.


En fin, no vamos a dar toditos los detalles, porque preferimos que vengan a conocerlo in situ y así poderle dar las explicaciones pertinentes observando su físico.


“POR ESTO Y MUCHO MÁS…VEN, MAIRENA TE QUIERE CONOCER”



Video de José Montero